No estás solo... Yo estoy
contigo (miedo)…
Y sepan que yo
estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo”.
Dios, Jesús está, estará siempre con nosotros, por eso debemos desterrar,
apaciguar el miedo y la soledad en su presencia.
CITA: San Mateo 28, 16-20.
‘’... Y sepan que yo estaré con ustedes todos los días, hasta
el fin del mundo”.
Palabras del
señor para tu día a día
Palabras del
señor para vivir ‘con ánimo y fe’
siempre una gran y perfecta ‘verdad ‘en un mundo gobernado por la mentira.
Se pues, (para muchos)
‘esperanza de vida’ Unción viva y actuando del espíritu del señor
El señor te dice que
necesita de ti, para ‘extender su reino’’ con tu vida, entrega tu respuesta
‘afirmativa’.
Meditando la cita completa podremos decir:
Tú también, tienes una
‘’cita con Jesús’’ un monte que te indica el señor. Obedece sus indicaciones y obtendrás bendiciones y gracia, que llevarás
a los tuyos y a quienes se crucen por tu vida.
Póstrate (adorar) ante
la presencia majestuosa de Jesús.
La adoración es la más
grande expresión de ‘la oración’ no te dejes ‘’contaminar’’ por aquellos que
‘titubean y dudan’
No te dejes manipular
por el ‘’enemigo ‘del señor.
No te dejes ‘influenciar’
por el maligno.
Alaba al señor cuando
estés frente a él (te recuerdo que su presencia ‘viva’ está dentro de ti, en
‘espíritu y verdad’)
Alaba y adora al
señor, no solo en la alegría y en el gozo
Alaba y adora, en esos
momentos en los que sientes que ‘estas sol@’ alaba y adora,
En momentos de
angustia alaba y adora
En esos momentos en
los que miras que ‘todo está perdido’ demuestra ‘tu confianza al señor’
Descansa en ‘el’ y su
misericordia, se ‘derramará’ sobre ti y
esa misericordia tú, la compartirás con
los tuyos.
Si nos examináramos a nosotros mismos y pensáramos porque
ciento miedos a estar sola u otros miedos, siento soledad aun estando con gente
o esa compañía no me llena, más allá de lo humano de cada debe estar la
apertura de corazón al amor de Dios, el espera amarnos, que nos dejemos amar
para nunca sentirnos solos aun estando solos, no dejar que el miedo nos domine.
Es nuestro tiempo, Ésta es la parte más importante de tu oración, disponte a
platicar con mucho amor con Aquel que te ama. Y a disfrutar de su compañía.
Hoy, en medio de mi trabajo o estudio, trata
de frenar un minuto para cobrar
conciencia de la presencia de Jesús en mí.
Dios con nosotros, dios en nosotros,
dios cercano que viene cono nosotros todos los días por las calles de nuestra
vida, hasta el fin del mundo.
Oremos pues para que la presencia de
Dios se manifieste en nosotros, en nuestras vidas y así poder transmitirla a los
demás.
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