jueves, 4 de marzo de 2021

SAN LUCAS 20, 27 - 40. LA ETERNIDAD.

 


Señor, hoy confieso ante ti, que creo en la resurrección, que la muerte es el paso a la vida eterna y, que ese camino lo realizamos desde aquí. Mi esperanza es saber que todo no termina en esta vida, más allá de lo que me pase, de lo que viva. Sé, que algo bueno va a venir a  mi vida, pero, siempre y cuando luche por ello y lo quiera.  Que como mujer, sepa que no soy una cosa, una cosificación, que tengo dignidad, sentimientos. Saber que el varón y la mujer no pueden ser cosificado, no pueden tratarse como una cosa entre ellos o el uno al otro, el de toda relación, y que es importante la dignidad, y porque tengo dignidad soy importante, que no nos usemos en relaciones matrimoniales porque nos unes para ser más felices, mi felicidad es junto al otro no a costa del otro, sino con el otro. Qué sea clara con las personas que camina en mi vida y en tu vida. Que haya paz Señor, y para eso muestre la verdad siempre.

Dame la gracia, Señor, de llevar una vida espiritual, porque es importante tener una relación contigo, que no se reduzca solo a normas o rituales, sino, que alimente mi espíritu, que descubra mi relación, mi "técnica" para estar contigo Señor, para llevar una vida espiritual y alimentar mi espíritu.

Sé, que tú estas conmigo, que me animas, que me anime a vivir contigo mi vida, y así, junto a tí alcanzar la eternidad.

 

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